Imagine Van Gogh en La Rural Pabellón Frers Santa Fe 4363
Imagine Van Gogh se extiende al 1 de mayo y suma funciones por las noches
La muestra inmersiva «Imagine Van Gogh» abre al público mañana y permanecerá hasta el 1 de mayo en La Rural, Pabellón Frers, sobre avenida Santa Fe 4363. Las entradas se venden en bloques de media hora con aforo limitado, aunque la permanencia en la exhibición no tiene un tiempo preestablecido. La muestra que itinera por el mundo desde el año 2008 y que se adapta a cada ciudad a la que viaja.
Al final del recorrido, ya una vez fuera del pabellón pero aún en el territorio de La Rural, se ubica un colorido café, idéntico a aquel que Van Gogh pintó en Café Terrace de la Place Du Forum, en la ciudad de Arles en 1888.
Se trata de la exposición inmersiva dedicada al pintor holandés, que invita a zambullirse en algunos de los más espectaculares paisajes de la historia del arte, como «La Noche estrellada» o «Los girasoles», en el Pabellón Frers de la Rural.
Así, frente a los ojos se suceden como en una danza las pinturas que el genio holandés creó durante los dos últimos años de su vida, entre 1888 cuando se traslada a Arles en el sur de Francia, hasta su muerte en Auvers-sur-Oise en 1890: «La Noche estrellada», «Los girasoles», «Los Lirios», o su «Dormitorio en Arles».
Las «Ramas de un almendro en flor» que Van Gogh pintó sobre un intenso cielo celeste, como regalo para su sobrino que acababa de nacer y a quien habían bautizado también Vincent; las pinceladas largas y amplias que describen «El camino a Saint-Remy», como un mosaico de colores entrecruzados, los campos de trigos, bajo los cálidos rayos de sol, o con sus nubes arremolinadas, las barcas de pesca en la playa también forman parte de este recorrido visual.
La impresionante selección de obras proyectadas aquí no podría coincidir físicamente en el mismo lugar y al mismo tiempo: se trata de piezas que forman parte de prestigiosas colecciones de museos como el Museo d’Orsay de París, la Galería Nacional de Arte de Londres, el Museo Van Gogh de Ámsterdam, el Museo de Arte Moderno MoMA y el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York.
En muchas de las cartas que Vincent escribió a su hermano Theo describe en detalle qué emociones quería reflejar en cada pintura en la que se encontraba trabajando: «sugerir el reposo o el sueño en general» es lo que buscaba el pintor con «Dormitorio en Arles», con sus sábanas y almohadas en limón verde muy claro; la colcha rojo escarlata; la ventana verde.